No todas las princesas desean ser salvadas.

Tinta sobre Papel.
30x20 cm
Vendido.


He buscado esa frase y he encontrado esto, que es algo que escribí hace mucho tiempo, y me he sentido tan reconfortada con mi prosa desordenada que he decidido copiar y pegar para volver a leerlo una y otra vez.

Como botellas de champagne, o sucedáneos azucarados, como placebos de alegría, como origamis llenos de fluídos corporales, se descorcha, hace BUM y voilá, bienvenido a un mundo feliz. Que dentro de esa placenta calentita te hagas daño a ti misma eso ya es otra historia.

La vida no es tan complicada, pero siempre queremos que todo el mundo tararee nuestra canción favorita. Quizás por ello tenga muchas canciones favoritas, es dificil entonar cuando el coro es tan dispar, las trompetas se pelean con los violonchelos y las tubas con los pianos de cola. Además no sé cantar, desafino, toso y me atraganto.

Hay cosas que hacen BUM, otras hacen Bum Bum Bum, otras hacen Click y otras parecen un montón de palabras de cristal que acaban de caer al suelo rompiéndose y haciendo mucho ruido y encima, para poder limpiar todo ese desastre tienes que pasar por encima con los pies descalzos, agarrar la escoba y borrar todo rasto de aquello que no vale nada.
De lo que se rompe haciendo ruido y ensuciándolo todo de mentiras no te fies nunca, por desgracia no te das cuenta hasta que te cortas, hasta que te deleitas viendo fluir la sangre por los cortes y hasta que no te sorbes tus propias lágrimas como si volvieras a tener 6 años y te agarrasen y te metiesen en un coche con todos tus pequeños recuerdos y otros monstruos y animales de peluche embalados en cajas de cartón, entonces no puedes hacer otra cosa que volver la mirada y ver como tu antigua y corta vida se aleja a través del cristal de la parte de atrás de un utilitario familiar de color amarillo canario...

[...]... and i´m starting to laugh / like an animal in pain / and i´ve got blood on my hands/ and i´ve got hands in my brain / and the first short retch / leaves me gasping for more [...]

En el continuo "ya veremos" de los días que vendrán no hay mucho tiempo para pensar en lo que no pudo ser, lo que no se hizo ayer no se puede hacer ahora, se puede hacer ya, pero no dentro de veinte minutos, no dentro de 5 días, tiempo perdido tiempo perdido, maldito tiempo perdido en el que a tantos les gusta pensar, no todas las princesas desean ser salvadas y yo no estoy en apuros, no estoy dormida, no necesito quedarme sentada, no existen caballeros de brillantes armaduras que tengan que venir a sacarme de la torre del invierno eterno y mi cabello no soportaría sus ochenta kilos (con extra de cota de malla) trepando por él. No. Dejadme en paz, con mis poluciones mentales vertidas en papiroflexia de colores, con mis dioses menores y mis recuerdos banales, con mis canciones y versos rebuscados, con mis botas llenas de gotas de lluvia, escalando muros de hormigón pintados de desastres antinaturales.


[...] - ¿No quieres ser un cangrejo, como todos los de ahí abajo? - Hizo un movimiento de presentación de la ciudad con la mano abierta-. No es vida, claro, es otra cosa; pero es mucho más cómoda. Es más cómodo dejarse llevar que nadar contracorriente, igual que es mucho más cómodo dejarse llevar que nadar contracorriente, igual que es mucho más satisfactorio tonto que ser listo: ser listo sólo trae problemas y sufrimiento. Es más confortable disimularse entre la multitud, sin duda, que tenerles señalándote, riéndose de ti o insultándote; pero una de las dos cosas te hace mejor hombre y la otra no. Por una de las dos cosas merece la pena estar vivo, mientras que la otra... La otra es un desperdicio. Es haber vivido como un animal [...] - Pero sé un cangrejo, si quieres. Estás en tu derecho. Sé una oveja cuyo único derecho es comer y defecar y fornicar, si quieres. Es tu vida, después de todo.
No me gustó la idea de ser un cangrejo. Y menos una oveja. Pensé: Vaya asco de opciones. No era precisamente Esopo.
- No quiero ser ninguno de los dos animales. Si no tienes algún otro animal más glamouroso no, no quiero ser ninguno de esos dos. - Jonhy Cactus soltó una carcada.
- Buena decisión. [...] (Cosas que hacen BUM, K.A. Un libro de un pretencioso escritor con grandes dosis de ego y frases a modo de declaración de intenciones, válido para una tarde aburrida).


Decía antes que el amor, o creo que hablaba de eso, que eso del amor no es ningún castillo, que no hay caballeros ni bailes, bueno, bailes si que hay, a veces hay disfraces, máscaras y bufones, sobretodo bufones, ni princesas... Pero no hay cuentos que soporten tanta tragedia ni escritor frustrado que sepa contarnos las cosas sin echar mano a sus verdades absulotas, hay malos, hay injurias, hay envidias, pero amor no hay, hay celos, mentiras y envidias, hay escritores que se creen sublimes por hablar en sus libros de ellos mismos creyéndose que son Demian, sufridores del día a día, al cuerno con sus sufrimientos y sus "no puedo con vuestras vidas", porque no hay amor en ellos, no hay pasión en sus ojos, no nay nada y nunca la nada estuvo tan vacía como los días de enero en los que amenaza tormenta y nos escondemos bajo las mantas buscando calor.

[...] I gasp/ for air/ What is the wear/ That shows on my face/ Pass your sense/ on to me/ Weigh my hands/ Resue Me [...]